Mostrando entradas con la etiqueta venezolanos. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta venezolanos. Mostrar todas las entradas

Lo que nos hace ser venezolanos

Mi_mo_to: Lo que nos hace ser venezolanos




Por Mirelis Morales Tovar


Foto: Ciudad Ccs

Tenía casi tres meses sin escribir en el blog.
En tiempos tan convulsos, no tenía inspiración.
Me resultaba difícil decir algo, cuando nada está claro. 
Pero creo que cada quien debe dar su aporte.
Y quiero pensar que este puede ser el mío.


En tiempos donde sólo vemos diferencias. En tiempos donde todos contra todos (como dice el amigo Fito). Consideré que lo más sano era escribir sobre lo que nos identifica, lo que nos hace ser venezolanos. Recordar lo que nos evoca nuestro gentilicio puede llevarnos a pensar más en lo que nos une, que en lo que nos separa.

Un venezolano que se respete dice “Feliz año” hasta que llega Carnaval.
Un venezolano se persigna cuando pasa frente a una iglesia, aunque tenga años que no reza ni un Padre Nuestro.
Un venezolano no ha comenzado a sentir los primeros síntomas, cuando le prende una vela a José Gregorio.
Un venezolano desde chiquito se come el cuento del “ratón Pérez”, aunque nunca haya visto a tal roedor.
Un venezolano es el único que entiende cuando le dicen “si, Luis”, pese a que no tenga idea de quién es ese señor.
Un venezolano no cree en supersticiones, pero recibe el Año Nuevo comiendo uvas, usando ropa interior amarilla, sacando la maleta, llevando dólares en la mano “por si acaso”.
Un venezolano sabe que nada como un sancocho para devolverle el alma al cuerpo, y una cerveza para pasar el “ratón”.
Un venezolano reconoce la diferencia entre un guayoyo, un tetero, un con leche, un marrón, pero no logra prepararlo como "el portu" de la panadería.
Un venezolano espera con ansias que llegue octubre para volverse monotemático y no cesar de “chalequear” al equipo contrario hasta que se acabe la temporada de béisbol.
Un venezolano entiende que en el estadio sólo se come  “papita, maní y tostón”. 
Un venezolano se aburre cantando “Ay, que noche tan preciosa” pero lo hace para no empavar el cumpleaños.
Un venezolano  desempolva los cds de gaitas cuando llega noviembre y canta “Faltan 5 pa las 12” cuando está punto de acabar el año.
Un venezolano sabe que  no hay “pelo malo” que no ceda ante un buen secador.
Un venezolano no estrena. El venezolano se pone tremenda “pinta”.
Un venezolano sabe que no hay parrilla sin guasacaca.
Un venezolano sabe que toda "Hora Loca" marca el fin de una boda.
Un venezolano no toma una foto familiar sin antes decir: digan whisky.
Un venezolano no sabrá dónde está México pero se sabe todas las canciones del Mariachi.
Un venezolano sabe muy bien que sin cava no hay playa.
Un venezolano echa gasolina con el "vuelto" y siempre le deja algo al bombero pal café
Un venezolano se las "echa" de tener el mejor chocolate del mundo.
Un venezolano reconoce la diferencia entre un telita, un palmizulia, un guayanés, un queso e mano y duro pa rallar.
Un venezolano se manda a rezar la culebrilla, aunque no tenga idea de por qué.
Un venezolano nace con su arepa bajo el brazo.
Un venezolano lleva por dentro alma de buhonero.
Un venezolano pide la bendición. De lo contrario, que asuma las consecuencias.
Un venezolano no cree en princesas, porque aquí lo que sobran son misses.
.

La arepa genera una batalla legal y levanta la ira de la comunidad venezolana en Toronto

Por Pablo A. Ortiz | NOTICIAS MONTREAL

- Batalla legal por la marca registrada de la Arepa en Toronto

- La arepa se convirtió en protagonista de una gran polémica lejos de su Venezuela natal: en la movida ciudad de Toronto.

Lo que comenzó como un mensaje en un grupo de Facebook se convirtió en una bola de nieve con cientos de comentarios, un grupo de venezolanos enfurecidos y un comunicado oficial.

Arepa Café abrió sus puertas en noviembre de 2009 con la finalidad de ofrecer a la comunidad del Greater Toronto Area lo mejor del tradicional plato venezolano. De igual forma la empresa inició el proceso para registrar la marca de su empresa ante la oficina de propiedad intelectual de Canadá.

Tiempo después otro joven venezolano logró abrir un pequeño puesto de comida en el movido mercado de Kensington. ¿El nombre? Arepa Market. De ahí en adelante se disparó un conflicto legal que requirió abogados y terminó con el cierre del segundo establecimiento.

En abril de 2011 el gobierno canadiense otorgó el registro de la marca Arepa Café a los dueños del restaurant. Poco tiempo después, exigieron al dueño de Arepa Market, a través de abogados, quitar el nombre con el que identificaba su negocio por considerar que confundía al consumidor y afectaba a su clientela y por consiguiente a su negocio.

El dueño de Arepa Market, ante la incapacidad de financiar un proceso legal, decidió apagar las luces y poner fin a su empresa a finales del verano pasado, antes de enfrentar demandas más serias.

Con el tiempo la historia se conoció y se regó como pólvora. Para la comunidad venezolana la decisión de Arepa Café de presionar por medios legales a Arepa Market es una injusticia, tomando en cuenta que todo el conflicto gira en torno a una palabra común dentro del vocabulario venezolano y latinoamericano que parece imposible registrar.

Pero para las leyes canadienses es distinto. Al no ser una palabra común del inglés o el francés, pudo ser registrada sin problemas y pasó por todos los procesos legales.

Ante las críticas, los dueños de Arepa Café decidieron publicar un comunicado relatando su postura en torno a la situación. Niegan haber forzado a Arepa Market a cerrar sus puertas y defienden su derecho de hacer respetar su marca registrada.

“Debemos recordar que todo lo que se intenta hacer es tratar de evitar confusión entre las marcas. Si esto se logra y se llega a un acuerdo, todos seguimos normal”, señala el comunicado.

Aún así, admiten haber actuado de manera legal ante Arepa Market como respuesta a la intención de su dueño de registrar también su nombre. “Digamos que esta ʻsegunda compañía (Arepa Market) opta por ignorar esta comunicación de solucionar la situación y más bien decide registrar su propio trademark con un nombre similar. ¿Cuál sería la reacción de la primera compañía al ser ignorada? La primera compañía debe utilizar los canales de la ley, enviando comunicados que no pueden ser ignorados”.

De igual manera señalan que no buscan “secuestrar” el término arepa, sino hacer respetar la ley.

¿Cuál es el problema?

Arepa Café cumplió los requisitos para registrar su marca y sustentó su demanda con el apoyo de la ley, de eso no hay dudas aparentes. Pero el problema radica en la intención que la comunidad venezolana de Toronto y Canadá percibe de las acciones de la empresa.

El grupo de venezolanos en Toronto en Facebook fue inundado por comentarios de usuarios molestos (más de 300). Creen que la acción es una simple maniobra legal para “secuestrar” el término tradicional venezolano y limitar cualquier tipo de competencia en la industria.

Según la demanda de la empresa, el problema es utilizar como marca el término “Arepa” seguido de un adjetivo descriptivo, lo que deja muy pocas opciones para potenciales empresarios no solo de Toronto sino de todo Canadá. Sin embargo, el término “Arepa Café” es visto como dos sustantivos en la lengua española, mientras que en Canadá el primero puede ser tomado como un nombre propio.
Las consecuencias

La molestia de los venezolanos de la región llegó a niveles altos, al punto que están organizando un boicot al restaurante de comida tradicional venezolana.

Otros han asomado la idea de realizar una protesta pacífica frente al establecimiento para exigir que se “libere” el uso del término Arepa.

El dueño de Arepa Market puso punto final a la historia y siguió con sus proyectos personales. Pero para la comunidad venezolana en el país parece una batalla que apenas comienza, ante una realidad sustentada por las leyes canadienses.

Twitter: @PabloJinko – pablo@noticiasmontreal.com

Foto: Flickr – Stevendepolo

Sobre el autor

- Periodista venezolano, fotógrafo y uno de los fundadores de Noticias Montreal. Trabajó en el diario deportivo Líder en Deportes de Venezuela cubriendo fútbol hasta que decidió iniciar una nueva aventura en Montreal. Música, tecnología e internet.

Lean en Noticias de Montreal: Arepa Café vs. Arepa Market, una historia que la comunidad venezolana en Toronto no quiere dejar morir.

.