Al Atleti se le complica la fase de grupos de la Europa League sin haberla comenzado.
Aún partiendo el Atleti como cabeza de serie y habiendo habido sorprendentes eliminaciones que allanaban el camino como ya comenté en un artículo anterior, el sorteo inicial no fue lo excesivamente cómodo que podría haberse dado, y aunque considero que el Atleti está por encima de todos sus compañeros de grupo, no son desde luego los rivales más fáciles que pudieran haber tocado.
Con el sorteo inicial el Atleti se enfrentaba al Udinese, al Rennes y al Sion suizo, sin embargo éste último estaba pendiente de una impugnación por parte del Celtic de Glasgow a quien eliminó en la eliminatoria previa anterior, por no haber respetado la prohibición de fichar con que fue sancionado y haber jugado con esos fichajes.
La UEFA finalmente ha resuelto excluir de la competición al equipo suizo y su lugar lo ocupará el Celtic de Glasgow escocés, lo que complica aún más el grupo del Atleti, pues a priori el equipo escocés tiene más potencial (desde luego más historia) que el equipo suizo, si bien es verdad que fue eliminado por los helvéticos.
El equipo católico de haber entrado en el sorteo hubiera entrado por su coeficiente (39.528) en el bombo 2 junto con el Udinese (27.110), por lo que estos dos equipos no deberían haber competido en un mismo grupo, de esta manera el grupo I de la Europa league se convierte en el más duro de la competición en el que no hay ningún representante del bombo 4 (con equipos cuyo coeficiente es inferior a 10.276). Recordemos que el Atleti partía como tercer cabeza de serie con 70.465, sólo superado por Tottenham y PSV
Está claro que de la UEFA no recibimos ningún trato de favor ni de rebote, todo lo contrario que lo ocurrido con el Athletic de Bilbao clasificado sin jugar el partido de vuelta y sin haber ganado el de ida.
Por otro lado es indudable que esto hace la competición, aparte de más dura, más atractiva, pues desde luego no despertará la misma expectación el enfrentamiento del próximo día 15 contra el Celtic que contra los suizos.
Lo que queda también claro es la ineptitud de la UEFA, pues no debió permitir la inscripción en la competición de un equipo que había fichado jugadores estando sancionado a no poder hacerlo, y no tendría que haber esperado a que el rival impugnara los dos encuentros, pues la sanción no es por la alineación indebida (como dicen la mayoría de los medios) sino por haber incumplido la prohibición de realizar fichajes, con lo que la UEFA podía haber actuado de oficio mucho antes de que se jugaran los encuentros (desde que se realizara el primer fichaje), algo para lo que tenía que haber velado también la Federación Suiza, pero claro, hablamos del país sede de la UEmaFiA.
Si la UEFA hubiera actuado antes, el Celtic hubiera sorteado desde el bombo 2 no pudiendo coincidir en un mismo grupo con el Udinese, y el Grupo I tendría un equipo del bombo 4 que ahora no tiene.
La resolución de la UEFA es recurrible y ahora surge la duda de qué pasaría si se juegan encuentros antes de que se resuelva la posible apelación de los suizos y estos la ganan.
Y la eterna pregunta, ¿esto hubiera pasado en un grupo de la Champions League una vez sorteado?
Aún partiendo el Atleti como cabeza de serie y habiendo habido sorprendentes eliminaciones que allanaban el camino como ya comenté en un artículo anterior, el sorteo inicial no fue lo excesivamente cómodo que podría haberse dado, y aunque considero que el Atleti está por encima de todos sus compañeros de grupo, no son desde luego los rivales más fáciles que pudieran haber tocado.
Con el sorteo inicial el Atleti se enfrentaba al Udinese, al Rennes y al Sion suizo, sin embargo éste último estaba pendiente de una impugnación por parte del Celtic de Glasgow a quien eliminó en la eliminatoria previa anterior, por no haber respetado la prohibición de fichar con que fue sancionado y haber jugado con esos fichajes.
La UEFA finalmente ha resuelto excluir de la competición al equipo suizo y su lugar lo ocupará el Celtic de Glasgow escocés, lo que complica aún más el grupo del Atleti, pues a priori el equipo escocés tiene más potencial (desde luego más historia) que el equipo suizo, si bien es verdad que fue eliminado por los helvéticos.
El equipo católico de haber entrado en el sorteo hubiera entrado por su coeficiente (39.528) en el bombo 2 junto con el Udinese (27.110), por lo que estos dos equipos no deberían haber competido en un mismo grupo, de esta manera el grupo I de la Europa league se convierte en el más duro de la competición en el que no hay ningún representante del bombo 4 (con equipos cuyo coeficiente es inferior a 10.276). Recordemos que el Atleti partía como tercer cabeza de serie con 70.465, sólo superado por Tottenham y PSV
Está claro que de la UEFA no recibimos ningún trato de favor ni de rebote, todo lo contrario que lo ocurrido con el Athletic de Bilbao clasificado sin jugar el partido de vuelta y sin haber ganado el de ida.
Por otro lado es indudable que esto hace la competición, aparte de más dura, más atractiva, pues desde luego no despertará la misma expectación el enfrentamiento del próximo día 15 contra el Celtic que contra los suizos.
Lo que queda también claro es la ineptitud de la UEFA, pues no debió permitir la inscripción en la competición de un equipo que había fichado jugadores estando sancionado a no poder hacerlo, y no tendría que haber esperado a que el rival impugnara los dos encuentros, pues la sanción no es por la alineación indebida (como dicen la mayoría de los medios) sino por haber incumplido la prohibición de realizar fichajes, con lo que la UEFA podía haber actuado de oficio mucho antes de que se jugaran los encuentros (desde que se realizara el primer fichaje), algo para lo que tenía que haber velado también la Federación Suiza, pero claro, hablamos del país sede de la UEmaFiA.
Si la UEFA hubiera actuado antes, el Celtic hubiera sorteado desde el bombo 2 no pudiendo coincidir en un mismo grupo con el Udinese, y el Grupo I tendría un equipo del bombo 4 que ahora no tiene.
La resolución de la UEFA es recurrible y ahora surge la duda de qué pasaría si se juegan encuentros antes de que se resuelva la posible apelación de los suizos y estos la ganan.
Y la eterna pregunta, ¿esto hubiera pasado en un grupo de la Champions League una vez sorteado?