No es novedad la desesperante situación que se vive en África, donde el interés internacional sólo se apoya de vez en cuando, como para justificar con lágrimas de cocodrilo todas las actividades económicas y sociales que contribuyen a la extensión en el tiempo del malestar africano. Uno de los principales problemas es la falta de agua, y con ella la pobre higiene que tienen millones de sus