Pufff, 4-3 frente al Rayo

Noche agradable en el Calderón que registra una buena entrada con algo más de tres cuartos de su aforo, para dirimir el primer derbi madrileño del Atlético en esta temporada.

Ambiente de celebración tras la derrota madridista, los pesares de Tristiano y los títulos conseguidos de Supercopa de Europa en fútbol y el Mundial de Clubes de balonmano, ofrecidos a la afición antes del encuentro, unido al buen juego desarrollado por los de Simeone en sus dos últimos partidos.

El Atleti formó un once inicial con Courtois (sigue en el Atleti, pese a los que auguraban alarmado su regreso al Chelsea), Juanfran, Filipe Luis, Miranda, Godín (también sigue en el Atleti, más páginas escritas y leídas para nada), Arda, Mario Suárez, Gabi, Koke, Diego Costa y Falcao (otro que sigue en nuestras filas, lejos de su padre y del Chelsea o de Rusia).

Un once que se me antoja que será el titular en más de un partido y en el que puede estar la novedad de Diego Costa en detrimento de Adrián, y que a juzgar por el estado de forma de ambos, creo que seguirá siendo la pareja de ataque inicial.

El Atleti se erige pronto como el dominador del encuentro, llegan las primeras ocasiones aunque no muy claras, a Diego Costa se le va viendo ya desde el principio como el auténtico protagonista del partido, parece que el Atleti no va a ser tan Falcaodependiente como muchos aventuraban, me gusta. Aún así el Atleti no es el avasallador que fue frente a Bilbao o Chelsea, pero partidos como esos tampoco se pueden jugar siempre, aunque quisiéramos.

Y con ese transcurrir de cierto dominio llega el primer gol con una internada de Diego Costa por la banda izquierda que centra al área donde Mario Suárez toca el balón para convertir el primer gol, magnífico papel el del brasileño.

Con el marcador ya a favor transcurre y termina esta primera parte sin nada especialmente destacable, dominio atlético aunque frente a un Rayo que sin embargo se planta bien sobre el campo y no juega mal.

Descanso con 1-0, el partido parece encarrilado pero hay que matarlo. Comienza la segunda parte y casi casi sin querer el Atleti marca 3 goles. Antes el Rayo dio algún susto como preludio de lo que luego acontecería:

Minuto 49, gol de Koke, 2-0, a pase nuevamente de Diego Costa.
Minuto 50, gol de Arda Turan, 3-0, a pase esta vez de Juanfran, en jugada que también inicia Diego Costa.
Minuto 54, internada de Diego Costa por la línea de fondo y es derribado en el área, penalty que transforma Falcao (con 3-0 en el marcador yo le hubiera permitido lanzarlo al brasileño, que intervino en todos los goles y en el propio penalty).

En 10 minutos de la segunda parte el Atleti ya iba 4-0, todo parecía resuelto con más de media hora por delante, mayor comodidad no se puede tener.

El Cholo comienza pronto con los cambios, primero el jugador del día: Diego Costa, que se va entre la ovación de la grada, (le sustituye el Cebolla Rodríguez), después Mario Suárez deja su puesto a Tiago, nueva ovación para el mediocentro que cuajó un gran partido, su baja se notaría después; y finalmente Adrián entró por Arda Turán, otro cambio que solo sirvió para empeorar. Todos estos cambios antes de que quedara apenas 25 minutos de partido, hay un partido europeo próximo pero quizás era demasiado cambio, o quizás no, el descanso a los jugadores y el marcador los justificaba. La realidad nos diría después que el Atleti dejó de funcionar.

El Rayo primero avisa con un disparo al travesaño, sin embargo no parece dominar el encuentro y no parece tener peligro, pero el Atleti le ha cedido bastante terreno y tampoco crea ocasiones ni domina. Y así es como casi sin que nadie se diera cuenta llega el primer gol en el minuto 81, parece anecdótico y fruto de un despiste aislado sin importancia dado los 10 minutos que apenas quedan para terminar el partido. Un gol que huele a gol de honor, creo que ni siquiera el Rayo se llevó rápido el balón al centro del campo.

Pero es que unos minutos después, a cinco para el final, el mismo jugador (Delibasic, no lo dije antes) marca el segundo del Rayo, empiezan los murmullos pero aún así parece que en tan poco tiempo dos goles no son posibles y que la ventaja es suficiente, sin embargo el miedo parece que se apodera más de los jugadores atléticos que de la propia grada más curtida en estos sustos finales (para qué recordar cierto partido con la Real que nos dejó sin participar en Champions). 

Y lo que parecía una posibilidad lejana de susto pasa a ser un acojonamiento (perdón por  la palabra, pero a veces ciertas palabras malsonantes son las mejores definidoras de una situación, por cierto, está recogida en el Diccionario de la Academia) cuando un par de minutos después llega el tercero, obra de Baptistao, increíble, un Atleti totalmente adormecido ha visto reducida su ventaja de 4 goles a uno solo en apenas 10 minutos (los mismos que empleó en adquirir tal ventaja), el 4-3 manda en el marcador y todo el mundo mira el tiempo que queda y lo que añade el asistente: 3 minutos de agonía, impensable 20 minutos antes.

Finalmente se mantendría este 4-3 y tres puntos para el Atleti. A falta del Valladolid-Betis de hoy, este resultado nos aupa al quinto puesto (con un partido menos), a cinco puntos del Barcelona y siendo los segundos máximos anotadores a pesar de ese partido de menos jugado. Buen comienzo, salvo el Barça y el Málaga todos los demás equipos que juegan competición europea quedan por detrás nuestro en la clasificación, no podemos perder esta condición en los próximos partidos, hay que ganar todos los puntos en juego en este mes de septiembre.