Dos epidemiólogos que trabajan en el proyecto Interphone, Dan Krewski de la Universidad canadiense de Ottawa y Anssi Auvinen del Colegio Público de Salud de Tampere en Finlandia, han comentado que los resultados finales del proyecto serán publicados entre finales de este año y comienzos del 2008.
Por más que se les ha tratado de conseguir información acerca de los posibles riesgos de la utilización del móvil a largo plazo, los epidemiólogos han dado la callada por respuesta (fuente: MicrowaveNews).
Recordemos que este proyecto se está llevando a cabo simultáneamente en 14 países y está investigando la posible relación entre la utilización del móvil y tumores como gliomas, meningiomas, neurinomas aústicos y tumores de la glándula parótida. El diseño de cómo se han llevado a cabo los estudios puede encontrarse en este enlace.
Por otro lado, hemos recopilado en un único archivo el informe BIOINITIATIVE. Entre las principales conclusiones del informe, que analiza cómo pueden afectar las emisiones de campos electromagnéticos (como los de la telefonía móvil y las antenas) a la salud, destacan que "los actuales límites de seguridad son inadecuados para la protección de la salud de las personas" y que se recomienda un límite de precaución de 0,1µW/cm² (0,6V/m) para la exposición a campos electromagnéticos en donde "la gente vive, trabaja o estudia". Estos niveles de protección son del orden de 1.000 veces más restrictivos que los actuales límites marcados internacionalmente por el ICNIRP y el ICES (IEEE).
Mientras, tanto, la actitud de las operadoras sigue siendo, en muchos casos, la de instalar antenas sin licencia, a pesar de los repetidos avisos por parte de la Policía Local. Una muestra más de que, si no les importa cumplir con la legalidad, podemos pensar que tampoco les puede importar nuestra salud. Todo sea por don dinero.